Entre el lunes 2 y el domingo 22 de noviembre se lleva a cabo El Viaje Continúa: Ciclo Virtual de Cortos Mexicanos, presentado por la Embajada de México y el Ministerio de Cultura porteño en colaboración con el Instituto Mexicano de Cinematografía, con el objetivo de celebrar la tradición mexicana del Día de Muertos. La muestra está disponible en forma gratuita a través de la web www.vivamoscultura.buenosaires.gob.ar.
Fueron seleccionados 13 cortometrajes, que se presentan para conocer la diversidad de realidades, miradas y propuestas estéticas presentes en la cinematografía mexicana contemporánea, así como para reconocer que toda despedida es siempre promesa de nuevos encuentros.
A través de la plataforma web del Ministerio de Cultura de la Ciudad, se podrá conocer más sobre este hito cultural que forma parte de la esencia mexicana y que es reconocido a nivel mundial.
La programación es la siguiente:
Lunes 2 al domingo 8 de noviembre
Hasta los Huesos (Dir. René Castillo, 2002): Historia de un hombre y su llegada al mundo de los muertos, donde es recibido por un gusano, calacas sonrientes y la mismísima Catrina descubre que salvo algunos inconvenientes, estar muerto no es tan malo.
Ramona (Dir. Giovanna Zacarías, 2014): Ramona, una anciana de 84 años, anuncia que está lista para morir. Mientras su familia hace los preparativos, ella cambia de opinión.
Los Ausentes (Dir. José Lomas Herver, 2017): Con sólo tres sones en su repertorio, el trío de huapangueros de Rafaelito, de siete años de edad, debe enfrentar su primer obstáculo en su corta carrera: amenizar un velorio en una comunidad de la Huasteca potosina.
El Pescador (Dir. Samantha Pineda Sierra, 2011): En el Día de Muertos, Leni, un viejo pescador, se embarca al mar en un viaje donde, a través de viejas fotografías, pesca sus mejores recuerdos.
La Noria (Dir. Karla Castañeda, 2012): En un pequeño poblado, el tiempo se detiene para un padre de familia que ha perdido a su hijo.
Lunes 9 al domingo 15 de noviembre
Jacinta (Dir. Karla Castañeda, 2008): Cuando no quedan más que recuerdos, en un asilo de ancianos rodeado de soledad una viejita decide seguir tejiendo su destino.
Lluvia en los Ojos (Dir. Rita Basulto, 2013): Sofía, una niña de siete años, recuerda el día en que se fracturó el brazo en una persecución por el bosque. Es una historia llena de fantasías que oculta un momento desgarrador en su vida.
El Último Canto del Pájaro Cú (Dir. Alonso Ruizpalacio, 2011): Minutos antes de morir en la sala general de un hospital urbano, Ulises reconstruye los fragmentos de su pasado. Al cruzar la frontera de la muerte se da cuenta de que se trata del momento más emocionante de su vida.
Piedra de Caballo (Dir. Cynthia Fernández Trejo, 2017): Matilde, una niña víctima de una enfermedad terminal, buscará la piedra que le permita cumplir la fantasía de convertirse en caballo y, quizá, hasta engañar a la muerte.
Lunes 16 al domingo 22 de noviembre
Cerulia (Dir. Sofía Carrillo, 2017): Cerulia inicia un viaje para despedirse de la casa de su niñez, pero los recuerdos y la presencia de los abuelos no la dejarán partir.
Los pedazos del tiempo (Dir. Elena García, 2018): Amelia llega al hospital, su padre está muriendo. La frustración y el dolor la mantienen de pie.
A través de los párpados (Dir. Luis Briones, 2015): En medio de un conflicto civil en un pueblito mexicano, una niña se enamora de un hermoso muchacho ya muerto.
No estás soñando conmigo (Dir. Jorge Y. Leyva Robles, 2015): Tosni, un niño de la etnia seri, debe completar el ritual que permite que el espíritu de su madre transite al otro mundo, aunque no le sea tan fácil dejarla ir.
El Día de Muertos, celebración considerada por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad desde 2008, se celebra en México cada 2 de noviembre y es el resultado del sincretismo entre la celebración del Día de Todos los Santos de Origen Católico y las milenarias tradiciones de los pueblos indígenas mexicanos de matriz comunitaria. Esa noche las familias se reúnen en casas y cementerios para recibir y honrar a quienes entre sus seres queridos “se adelantaron” al otro mundo en este viaje llamado vida, por medio de altares con flores, inciensos y rica comida para compartir. Así, esta fiesta de la cosecha deja ver con fuerte claridad el carácter festivo y hospitalario tan característico de la cultura mexicana, al tiempo que nos brinda una oportunidad más para celebrar la vida con nuestros seres queridos de éste y del otro mundo con la promesa de que el cariño permanece y de que la fiesta continúa.
Foto principal: Lluvia en los Ojos, de Rita Basulto.