Sergio Acosta es el presidente del Instituto de Artes Audiovisuales de Misiones, que a través de un programa sostenido de convocatorias y de ayuda a la producción local, regional e internacional, mantiene una actividad constante en la búsqueda de nuevas herramientas de financiamiento, destinadas a potenciar el sector audiovisual en la provincia.
Además, mantiene una activa participación en foros, mesas y reuniones institucionales, buscando nuevas herramientas para sostener la actividad.
–A partir de las diversas convocatorias propiciadas por el Instituto de Artes Audiovisuales de Misiones, con la mira puesta en coproducciones regionales e internacionales, ¿qué evaluación hacés en relación a los acuerdos con el Instituto de Artes Audiovisuales de Jujuy y el Instituto Nacional Audiovisual de Paraguay?
Acordamos una alianza estratégica con el Instituto de Artes Audiovisuales de Jujuy para un concurso de coproducción de cortometrajes. El año pasado hicimos un trabajo muy intenso con Facundo Morales, en su momento presidente de IAAJ, que ahora continúa con Patricio Artero, el nuevo presidente. Estamos muy contentos con esa convocatoria, porque las provincias entendemos que es un momento de juntarnos, potenciarnos, sinergizar nuestras fuerzas y brindarles más oportunidades a los productores y realizadores de nuestras provincias.
También suscribimos un acuerdo con el Instituto Nacional de Audiovisual Paraguayo, equivalente al INCAA de Paraguay. Para ambos casos estamos organizando charlas informativas y también espacios de encuentro, porque consideramos importante que nuestros productores y directores se conozcan y se junten, para ver qué proyectos hay en carpeta. En los dos casos los concursos están financiados por ambas partes: Misiones y Jujuy por un lado; Misiones y Paraguay por otro.
Es fundamental abrirse a este tipo de convenios, hacer estas inversiones que quizás no estaban previstas en un principio, pero son necesarios. Es un poco doblar la apuesta. Todo recurso que pueda ser traccionado o dinamizado de un lado o del otro le sirve al sector; a los productores, técnicos y actores.
-¿En qué estado se encuentran los planes de fomento de la provincia?
Hay una gran actividad. Por un lado, tenemos dos líneas abiertas hasta el 23 de junio para productores misioneros y paraguayos o un productor argentino que se asocie con un misionero y pueda buscar un socio paraguayo, de coproducción de cortometrajes y codesarrollo de largometrajes.
El objetivo es que tanto nuestros productores como directores y guionistas se conozcan y puedan trabajar juntos para aprovechar los recursos, tanto de Paraguay como de Misiones. Pensando un poco a mediano plazo, si funciona bien la línea de codesarrollo el año que viene la vamos a extender. Por otro lado, estamos trabajando en una línea de coproducción de largometrajes con fomento tanto paraguayo como misionero. Está abierta hasta el 3 de junio.
Estamos prontos a lanzar las convocatorias para los productores y directores misioneros que residan en la provincia para concursos de ópera prima -tanto de ficción como de documental- y otras líneas. En pocos días más vamos a anunciar el calendario completo para todo este año.
Mientras tanto, se están pagando y ejecutando las líneas de año pasado. Ya empezaron a rodarse series de televisión y cortometrajes, tanto experimentales como de ficción. A partir del cash rebate, esperamos los rodajes de largometraje para el primer semestre de 2026.
-En los últimos días de febrero se creó en la provincia por decreto el primer cash rebate de la región, con beneficios que llegan hasta el 45%. La convocatoria cierra el jueves 24. ¿Qué evaluación hacés?
Es otra de las líneas que siguen vigentes. Se trata del primer programa de reembolso de la provincia. Se trabajó todo el año pasado con el área de fomento, a cargo de Santiago Carabante y su equipo y se lanzó el 20 de febrero de la mano del gobernador de Misiones, Hugo Passalacqua.
Es un espaldarazo importante para el cine que el gobierno provincial esté detrás de esto. Más allá que el IAAviM es parte del Gobierno de la provincia, en este caso el propio gobernador hizo el anuncio.
Hay muchas consultas por esta línea de fomento, por los reintegros que son de hasta el 45% de lo que se invierte -si cumplís algunos requisitos que tienen que ver con la agenda de la provincia-, con un tope de 80 millones de pesos. La inversión mínima es de 15 millones, por lo que se puede aplicar también para productoras más chicas que tengan cortometrajes o programas de televisión. En un momento en que hay una gran falta de fomento nacional, el cash rebate es una herramienta que permite reintegrarte una inversión. Pero todavía falta una parte del crédito que permita financiar el rodaje, para después acceder al cash rebate. Esa es la complejidad que atraviesa el sector en este momento. Pero como herramienta provincial, es un orgullo haber lanzado un cash rebate en menos de un año. Parte de la política del gobernador, con una visión estratégica, es hacer la provincia más competitiva en el plano audiovisual.
–Ante la falta de una política pública clara de fomento por parte del INCAA, las provincias están dando un paso al frente.
Desde la provincia hemos salido a trabajar políticamente para sostener la actividad. Esto implica sostener el trabajo, la forma de vida o cultura de los trabajadores. La situación ya era compleja, pero después de un año y monedas desde el inicio de la nueva gestión del INCAA, cambió bastante el panorama. Ya no es la misma Argentina. Está siendo configurada de otra manera. Frente a ese escenario, las provincias hemos ganado terreno. Concretando los cash rebates y los acuerdos interprovinciales, con el objetivo de demostrar que la sinergia regional y provincial es posible.
–En el marco del BAFICI, Misiones participó en dos encuentros: “Mercados regionales de cine: oportunidades y desafíos” y “Cash Rebate con representantes gubernamentales”. ¿Qué conclusiones extrajiste?
En la charla de cash rebate estuvo Santiago Carabante; en la de los mercados estuve yo representando al Mercado Entre Fronteras.
Ambos paneles estuvieron compuestos por una configuración de provincias que tienen una ley o un organismo de fomento al audiovisual. También estuvo representada la ciudad de Buenos Aires. Estas son las provincias con las que estamos trabajando en la gestión pública. La mayoría de nosotros venimos del sector, una coincidencia relacionada con que hacía falta un cambio de mirada. Nuestra lectura es que hay un nuevo federalismo. Hay una mirada estratégica sobre cuáles son las provincias que están trabajando e invirtiendo para acompañar ese desarrollo. Va en detrimento de las otras provincias, que por decisión política o gubernamental no tiene una política de fomento audiovisual. Pero frente a esta situación, en la cual la producción de cine se paró completamente, tenemos que lograr es un efecto multiplicador. Que las provincias, los gobernantes y los legisladores de cada provincia vean la necesidad de una ley, de un instituto de fomento para poder explotar lo que permite el audiovisual: el derrame económicos en los lugares, la atracción de inversión, la sinergia de trabajadores con trabajo en blanco. Esa es la lectura que hacemos después del BAFICI, con la esperanza de que el futuro vaya por las provincias. Es una responsabilidad muy grande, pero creemos en la importancia del diálogo.
-¿Cómo se compatibilizan las diferentes miradas de cada provincia, de cada región?
En principio, porque hay voluntad políticas. Las provincias tenemos distintos colores políticos. La mayoría de los gobiernos responden a partidos provinciales y hay pocas provincias con instituciones como nosotros, que responden a partidos tradicionales.
Más allá de los colores políticos, el diagnóstico es claro: trabajamos para que la actividad no se caiga, pensando en la importancia del fomento provincial. Si no hay política nacional de fomento, es muy difícil que una o varias provincias podamos reactivar el actual escenario. Es necesario discutir los modelos de producción actual, porque hay diversos costos de producción: uno está marcado por el INCAA, otro por la CAIC (Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica), otro costo de la plataforma y además hay diversas escalas salariales. Con los fomentos provinciales solamente no alcanza. Ante esta nueva configuración de federalismo, necesitamos que el INCAA empiece a responder o actuar con respecto a lo charlado en la Asamblea Federal. Tiene que empezar a efectivizar los aportes a las provincias, tanto de festivales como fomento. Esperemos que pase este año para no perder más tiempo y reactivar la actividad el año que viene. El sector está esperando realmente que podamos volver a filmar.
-En la Asamblea Federal se habló de cumplir el compromiso de aportes para festivales y programas de fomento en las provincias. ¿Hubo algún avance con las autoridades del INCAA?
Esta gestión se dedicó a recortar pero recaudó todo el año pasado, mientras las provincias invertimos fondos propios en cine. A principios de año, desde la Asamblea se planteó que el objetivo del INCAA es acompañar al proceso productivo, pensando más en las regiones productivas, en provincias con instituciones y festivales de larga trayectoria, con una política de acompañamiento a la inversión provincial.
En teoría, se va a avanzar. Hay un compromiso de recibir una propuesta en estos días. La próxima Asamblea se realizará el 9 de mayo en modo virtual. Necesitamos que la propuesta se concrete. El año pasado las provincias no tuvimos ningún tipo de ayuda ni de soporte por parte del Instituto. Es importante que este año se efectivice el compromiso.
-¿Qué otros aspectos a resolver abordaste en tu encuentro con las autoridades del INCAA?
El pedido de inclusión del Mercado Audiovisual Entre Fronteras en la RECAM. De esta manera el RECAM, un órgano que depende de la autoridad del Mercosur, puede también acompañar financieramente al mercado. Necesitamos que toda la Argentina pueda participar, no solamente en Misiones o en el NEA. Para eso tiene que estar involucrado el INCAA, así como en Brasil está involucrada la Agencia Nacional de Cine (ANCINE).
La otra cuestión es que la Argentina pueda defender a los proyectos que se presentan en Ibermedia para formación. Desde hace varios años ningún proyecto de formación gana Ibermedia. Hemos mandado proyectos varios años seguido y nunca queda un argentino. En codesarrollo y coproducción hay muchas iniciativas que todos los años ganan en espacios como Fundación Carolina o Bolivia Lab, asentados desde hace muchos años como espacio de formación para Iberoamérica.
Creemos que tiene que ver con una decisión política, con una posición de ir y defender los proyectos o líneas. Con una autoridad del INCAA que se siente a esa mesa, defina cómo se financia y permita distribuir esos recursos.
Otro pedido pedido tiene que ver con que vuelvan las ayudas para los productores, para que viajen a festivales y mercados. La gestión actual derogó esa resolución. No hay fondo de movilidad. Es muy difícil conseguir ir a un festival o a un mercado y conseguir un socio, escalar el proyecto y conseguir inversores para armar una coproducción internacional. Si no se viaja con un proyecto a esos espacios donde hay premios, será muy difícil generar esas coproducciones.
El IAAviM, el año pasado, lanzó un fondo de movilidad de 400/500 dólares, que sirve para complementar la posibilidad de un viaje a un mercado. Para participar, un productor tiene que tener una invitación a una selección oficial a un festival o un mercado. Y afrontar gastos como el pasaje o un viático. Lo que se pide al INCAA es una parte para completar el viaje. Pedí que eso pueda ser considerado, porque si no estamos sujetos a lo que ocurra solo en Argentina. Por supuesto que hay que trabajar en un cupo o un monto; ver la forma de selección de los proyectos. Pero es importante que ese fondo vuelva. Que los productores puedan empezar a viajar con la ayuda del Instituto. Son herramientas concretas, en las que hay que aplicar un poco de pragmatismo y no tanta discusión ideológica en las cuales no estamos de acuerdo.
-¿Lo creés factible?
Con Carlos Pirovano, el presidente del INCAA, no estoy de acuerdo en un montón de cosas. Pero es necesario el diálogo. Somos representantes de instituciones que fomentan el cine, tanto en la provincia como a nivel nacional. Tenemos que dialogar y encontrar los puntos en común, más allá de que no pensemos igual o pensemos completamente opuesto. Tenemos que lograr generar herramientas para el sector audiovisual. En eso estamos, tratando de activar cosas que han sido desactivadas. Lo creo porque son cosas posibles. Hay cosas con las que no se puede negociar. Es su gestión y su mirada sobre el fomento. Pero lo que se pueda negociar o plantear, hay que hacerlo.
-Si se pueden generar lazos interprovinciales, también puede retomarse el vínculo con el INCAA como fuente de recursos.
También es importante la autocrítica. Siempre lo hemos dicho. El INCAA históricamente financió hasta la Copia A, hasta que la película esté terminada. Sin incluir lanzamiento, publicidad ni distribución. Hemos tenido un instituto que ha fomentado la producción, pero no la distribución. El esfuerzo que hace la provincia y la región choca con esa falencia.
Tenemos que desandar el camino y pensar cómo distribuimos estas películas, cómo la vendemos, a dónde van, cómo las hacemos circular. No solamente hay que producir películas, sino después hay que distribuirla, venderla y exhibirla. Toca reconstruir y encontrar una forma hacer un corredor audiovisual entre las provincias para pasarnos los contenidos, las películas y poder acompañar a los estrenos. Poner a disposición no solamente el fomento, sino también la exhibición. Eso va a ser clave en el futuro.
Julia Montesoro