Programación del jueves 10 del 37º Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, que está integrado por más de 180 películas provenientes de 28 países y se lleva a cabo hasta el domingo 13 de noviembre.
La Competencia Internacional ofrecerá este jueves dos novedades de relevancia. Por un lado O trio em mi bemol, nuevo trabajo de la cineasta portuguesa Rita Azevedo Gomes, basada en la obra teatral de Éric Rohmer, The Kagelstatt Trio. Allí, una ex pareja mayor se reúne un año después de su separación para tener una serie de charlas sobre música y amores. Además se verá Cambio cambio, segunda película del director argentino Lautaro García Candela, un curioso thriller callejero ambientado en el universo de los “arbolitos”, personajes típicos de la city porteña dedicados a comprar y vender dólares; la ternura y la amistad ocupan un espacio central en la vida de estos protagonistas.
Por su parte la Competencia Argentina llega a su fin con la exhibición de su último título seleccionado. Se trata de Herbaria, de Leandro Listorti, quien relaciona el mundo y los procedimientos de la botánica con su propio trabajo en la búsqueda y preservación de archivos fílmicos, lo que ha moldeado su visión como cineasta y su forma de hacer cine. En tanto que Tinnitus, del brasileño Gregorio Graziosi, narra la historia de una nadadora especializada en saltos ornamentales cuya vida se desmorona al verse aquejada por la afección del título. A partir de un minucioso trabajo de diseño sonoro, la película se convierte en una experiencia sensorial inquietante.
Por último, la Competencia Estados Alterados le dará pantalla a cuatro nuevos títulos. Se trata de Afterwater, un tríptico que trabaja sobre tres formatos distintos (16mm, video y digital) y utiliza los recursos del documental, la ficción y el cine experimental, con el agua como elemento aglutinador. Dirigida por Dane Komljen, la película navega por el vínculo que las personas establecen con ella. También se verán los cortometrajes Maria Schneider, 1983, de Elisabeth Subrin; The Newest Olds, de Pablo Mazzolo; y Manuale di cinematografía per dilettanti – Vol. 1, de Federico Di Corato, que se proyectarán juntos.
La grilla de Autores y Autoras reúne los últimos trabajos de dos cineastas que ya son clásicos del Festival. Se trata de Walk Up, del surcoreano Hong Sang Soo, y de SINFON14, de Raúl Perrone. La primera es la historia de un director de cine cuya vida se ve conmovida por los vínculos efímeros que entabla con distintas mujeres, a partir de charlas que transcurren en los diferentes pisos de un mismo edificio. Hong en estado puro. En la segunda, el maestro de Ituzaingó vuelve a poner su habitual arsenal estético a disposición de una historia de época sobre un grupo de aristócratas que escapan de perseguidores desconocidos hacia un lugar indeterminado. La propuesta de la sección se completa con Tales of the Purple House, de Abbas Fahdel, y el documental de ensayo Lynch/Oz, de Alexandre O. Philippe. Mientras que la sección Nuevas Autoras – Nuevos Autores tendrá como novedad la proyección de I Love My Dad, de James Morosini.
Actividades especiales
A las 17:30 en Club Español se llevará a cabo la última de las Charlas con Maestros. En este caso, el protagonista es el gran director de fotografía Rui Poças, quien trabajó, entre otros, con nombres como João Pedro Rodrigues, Miguel Gomes y Lucrecia Martel. En una charla dirigida a todo el público, trataremos de dar cuenta de una profesión tan importante como (a veces) relegada por el conocimiento del público. Modera Marcelo Alderete.
A las 15 en el Hall Auditorium tendrá lugar la tercera entrega de Lo que vendrá, un encuentro en el que cineastas, y especialistas de la crítica y la programación cinematográfica recomiendan películas imperdibles de los siguientes tres días en un panel abierto al público. Modera Juan Pablo Cinelli.
A las 15:30 en el Club Español, bajo el nombre ¡Filmá el libro!, la cineasta Jimena Monteoliva (Crudo Films) y el escritor Leo Oyola dialogarán sobre el proceso de traducción del relato escrito al audiovisual y cómo identificar el potencial cinematográfico en un libro. Modera Mariano Kairuz (Penguin Random House).
Actividades del miércoles 9
La 37ª edición del Festival ya atravesó el meridiano de su primera mitad, pero las actividades sostienen su ritmo intenso. Este miércoles fue el turno de una de las últimas Charlas con Maestras y Maestros, que tuvo como protagonista a la cineasta francesa Patricia Mazuy, a cuya obra se le dedica una exhaustiva retrospectiva. La cita fue en el amplio salón del Club Español y fue moderada por Paola Buontempo, integrante del equipo de programadores del Festival. Durante la charla, la directora contó cómo fue su acercamiento al cine: “Como vivía en el campo, tenía que viajar hasta la ciudad para poder ir al cine, donde me gustaba ver westerns y películas soviéticas. Me fascinaba encontrar un universo nuevo”. También reveló que lo que más le gusta del cine en tanto medio de expresión artística es su carácter “irreal, más grande que la vida”. “Las películas me han permitido hacer cosas que no haría en la cotidianidad, pero en el cine sí”, completó.
“Hago mis películas eligiendo un entorno determinado, generando un territorio específico y limitado. Busco crear un universo particular para luego echarle adentro un elemento perturbador”, expresó Mazuy. Agregó además que “uno tiene que pensar en el mundo que quiere crear y tomárselo en serio para poder sumergirse en él”. Enseguida, destacó el rol que actores y actrices cumplen dentro de ese proceso creativo: “Al principio tenía miedo de trabajar con actores de teatro, pero son muy formados y siempre están dispuestos a ir a fondo”, dijo. Luego agregó dos conceptos sobre el tema. Por un lado, que “un actor no profesional corre el riesgo de terminar fragilizado al interpretar un personaje”. Por el otro, que le gusta “encontrar en una actriz la presencia de cierta opacidad y simplicidad primitivas”.
Por último se refirió a Bowling Saturne, su trabajo más reciente, en el que aborda con crudeza el tema de la violencia. Sostuvo que en esa película, a la que definió como un “thriller de lo salvaje”, ciertos elementos de “lo documental” están presentes “en lo íntimo” de algunas situaciones. “Es algo que primero trabajamos con el guionista y luego con los actores”, sostuvo antes de concluir que “Bowling Saturne habla de lo complejos que somos los seres humanos y cómo estamos atravesados por cosas que se nos escapan”.
En consonancia con los festejos del centenario del nacimiento del cineasta experimental Jonas Mekas –y como complemento de la proyección de un programa que incluye sus films Award Presentation to Andy Warhol, Happy Birthday to John y Notes for Jerome–, se presentó el libro Destellos de belleza, editado por Caja Negra, con la participación de Malena Rey (Caja Negra) y Lucas Granero (revista La vida útil).
Para comenzar, Rey leyó “El lenguaje y yo”, uno de los 98 textos incluidos en el libro, en el que el cineasta lituano narra su primera aproximación al cine y, sobre todo, a las formas a las que suscribió y que lo caracterizarían a lo largo de toda su obra, además de su relación con artistas cercanos y amigos que lo apoyaron. Y agregó: “Pienso a Mekas como un artista del siglo XX –como lo son Agnès Varda y Jean-Luc Godard– que mientras filmaba iba generando un registro sensible del mundo. Y en estos ‘destellos’ que cuenta en el libro también está ese registro, en el cual el concepto de anécdota funciona como eje y que, en lugar de las formas de una autobiografía –algo que sí pasaba en sus diarios–, arma un mosaico de relatos que no están regidos por la temporalidad”.
Por su parte, Granero puntualizó en una imagen que aparece en el libro: “Hay una foto en la que se lo ve a Mekas acompañado de algunos de sus amigos artistas contemporáneos, tomada en la noche de la inauguración del Anthology Film Archives, en noviembre de 1970. Para mí, posiblemente, es la fotografía más importante de la historia del cine, porque esa noche se crea lo que para muchos cineastas sería el refugio que tanto necesitaban, y que continúa existiendo hasta el día de hoy”.
Luego de lecturas de fragmentos del libro por parte de Javiera Pérez Salerno, Lucas Garófalo y Natalia Laube, Rey concluyó: “Sus libros y su obra son la respuesta a cómo construir lazos afectivos, cómo crear con otros. Pidió muchos favores y también hizo muchos favores. Fue un verdadero gestor cultural”.
Foto principal: Herbaria.