El 3 de junio se cumplieron 30 años del estreno de Tango feroz, la ópera prima de Marcelo Piñeyro protagonizada por Fernán Mirás, Cecilia Dopazo y Leonardo Sbaraglia, que marcó el reencuentro del público con el cine argentino en épocas de vacas flacas. Tres décadas después, una nueva producción en rodaje, Leyenda feroz, documental codirigido por Mariano Frigerio y Denise Urfeig con producción de Salamanca Cine, le rinde tributo a aquel film icónico y a la vez mantiene viva la leyenda.
-¿Qué estaba primero, la admiración por “Tango feroz” o la propuesta de este documental?
Mairiano. La admiración, sin dudas. Cuando hicimos Carroceros notamos el fanatismo de mucha gente alrededor de Esperando la carroza y su vigencia. Después de estrenarla nos preguntamos qué otra película nos había marcado y espontáneamente surgió Tango feroz. Los dos somos de una generación en la que fue la primera película que nos marcó. Ya no como un producto infantil sino como aquella en la que pudimos ir con nuestros amigos y después la seguíamos recordando.
-¿Eran público de cine o fueron especialmente convocados por Tango feroz?
Denise. Tenemos respuestas distintas porque soy un poquito más grande que Mariano. Ya iba mucho al cine y me encantaba: mi papá me llevaba mucho de chica. En 1993 ya era adolescente y me acuerdo que estaba esperando que se estrene. Hubo bastante movida antes: habían repartido unas postales en un recital de Fito Páez al que había ido y habíamos visto afiches callejeros. Fui a verla con un grupo de amigas la misma semana que se estrenó. Me acuerdo muchísimo del cine, de la función, de salir y decir “yo quiero esta vida, quiero un novio como Tango”, de fanatizarme mucho con la película y con el disco.
Mariano. La película se estrenó cuando tenía 12 años, pero me acuerdo mucho que era un boom: todo el mundo la veía y la comentaba. Era chico y no podía ir, pero insistí tanto en casa que a final de año mi papá me llevó.
Fue una experiencia iniciática que no me olvidé más. A partir de ahí me hice fanático de todas las películas de (Marcelo) Piñeiro. Las seguí religiosamente.
-¿Qué buscan con Leyenda Feroz? ¿Cuál es el propósito?
Denise. En la película anterior quisimos homenajear a Esperando la carroza. Pero Tango Feroz marcó otra cosa: no es de culto sino una película bisagra. Nunca se había hecho una producción tan grande, ni con ese sonido ni que se venda tanto el disco, ni que genere tanto público y tanta fama en los actores. Entonces, para seguir homenajeando al cine argentino elegimos este hito.
Mariano. También tiene un costado muy interesante. Como lo que pasa en este país cuando algo es un suceso, aparecieron los detractores. Haciendo este documental lo descubrimos: hay una parte del mundo de los rockeros de esa época que… bueno, no son fanáticos de la película (Risas). También indagamos eso. Lo mismo ocurrió en el mundo de la crítica: es una película muy popular, pero a la vez cuestionada.
Denise. Hay un conflicto y una cuestión medio oculta que vamos a intentar contar.
-Cierto sector cuestionó la película por ser “demasiado comercial”. Lo cierto es que Tango feroz volvió a convocar al público a las salas.
Mariano. Me sorprendió que los protagonistas nos contaran que a priori no la percibían como una película comercial. Marcelo Piñeyro nos dijo que ese año se habían estrenado 13 películas. Doce de ellas tuvieron el apoyo de Telefé o de Canal 13, que eran muy importantes para la difusión. La única que no lo tuvo fue Tango feroz Iba radio a radio para promocionar la peli, pero recibía como respuesta que la canción no estaba buena, que no iba a pegar. Me resulta atractivo indagar ese mundo, entre lo que pasa antes y dedespués, cuando explota de repente y nadie sabe bien por qué.
-Seguramente ustedes encuentran las respuestas en este documental. ¿Cuántas veces vieron Tango Feroz y qué nuevos significados le encuentran ahora que están trabajando en este proyecto?
Mariano. La vi mil veces. Soy muy de volver a ver películas. Pero solo una vez en cine: después, nunca más. Hasta que recientemente la proyectaron en el Gaumont y volví a verla en pantalla grande. Allí pude apreciar cosas que antes no había advertido. Me parece que es un peliculón, que sigue completamente atractiva. A la salida del cine vi que la gente salía igual de emocionada, a 30 años de su estreno. Y eso que está en cualquier plataforma. Pero de todos modos la gente se sigue emocionando con la historia.
Denise. En mi caso no fueron tantas, aunque últimamente la vi en el Gaumont y en otra proyección que hicimos para el documental. También cuando empezamos con el proyecto. Encuentro algo muy de época, de cuando yo era adolescente y estaba el menemismo y había una corriente de militancia que hacía que todo fuese con más fervor. Me parece que envejeció súper bien porque esa emoción y ese mensaje está, pero tiene algo muy de la época y muy de los 90. Todo esto para una historia de amor clásica.
-En todo álbum hay una figurita difícil. En este caso, con el rodaje a punto de concluir, ¿cuál es la figurita difícil de la película?
Mariano. Más que difícil, postergamos el encuentro con Fernán Mirás por una cuestión de agenda. Con él estamos en contacto desde el primer día. Pero no nos pasó tanto.
Denise. Una figurita difícil es Litto Nebbia. Pero todavía confiamos en que ocurra el milagro y podamos coordinar con él.
-Después de Carroceros se metieron con Leyenda feroz, como otro homenaje al cine argentino. ¿Por qué les interesa trabajar en esa línea?
Denise. A los dos nos encanta el cine argentino. Somos muy fanáticos, muy defensores y muy público. Cada vez que sale una película argentina la vemos.
Julia Montesoro