En la mañana del viernes 9 se conoció la triste noticia del fallecimiento de la reconocida directora de fotografía Paula Grandío.
Nacida el 20 de abril de 1962, entre muchas otras actividades fue gaffer, cámara, trabajó en distintas áreas de producción, llevó a cabo muestras fotográficas y diseño de luces en puestas teatrales. Además fundó la productora Mandrágora junto a Liliana Paolinelli.
En 1997 dirigió el cortometraje Traición. Ese mismo año codirigió con Cristina Fasulino el largometraje inconcluso Emma Zunz, protagonizado por Rosario Bléfari.
“Estudió con Juan Travnik (actual curador de la muestra y del espacio de fotografía del BAC, así como de la Fotogalería del San Martín), en la Universidad de Nueva York, y en diversos talleres (entre ellos el de Guillermo Kuitca en Antorchas).
Paralelamente, asistió durante cuatro años, durante los 80, al taller literario de Abelardo Castillo, para conseguir algunas pistas que la ayudaran a dilucidar el misterio alquímico que a veces se produce entre la palabra y el actor, y la mejor manera de retratarlo. Y, aunque aún no pueda decir que su paso por las galerías haya sido muy extenso, sí cuenta con una serie de exposiciones colectivas (entre ellas, la de los últimos premios Constantini en el Museo Nacional de Bellas Artes) que han sido algo así como un rito iniciático a su situación actual”, describió Natalia Fernández Matienzo en Página/12 en 2001.
Egresada de la ENERC, fue directora de fotografía de largometrajes como Por sus propios ojos, Amar es bendito, El baldío, Rosa Patria, El sur de una pasión, Tocá para mí, Silvia Prieto, Lengua materna, La León, No quiero volver a casa y La antena.
Según el sitio imdb.com, su última película fue Saru. Documental sobre Jorge Sarudiansky, de Ale Isler, estrenada en 2016.