El INCAA, su vigencia y el nuevo proyecto de Ley Audiovisual Federal es el título con que la revista Directores, publicación de Directores Argentinos Cinematográficos, publicó un informe del jurista, filósofo y exdiputado de la Nación Julio Raffo, asesor del Espacio Audiovisual Nacional, acerca de los comentarios suscitados en torno a la posibilidad de disolver el INCAA frente a la coyuntura electoral.
Este es el texto de la publicación:
1. Si me preguntan si es posible que un próximo gobierno cierre -o extinga- el INCAA, la respuesta ha sido y será siempre que eso “es jurídicamente posible”, porque la Ley 17741 y el nuevo proyecto de Ley Audiovisual Federal que creó y estructura al INCAA, como cualquier ley, puede ser derogada o modificada por otra ley. Pero ante una posibilidad formal al respecto, cabe preguntarse si es o no “probable”.
2. Al respecto, entiendo y estoy convencido de que, por diferentes motivos, no es probable que se realice esa disolución, y lo digo por las siguientes razones:
a) La disolución que se señala como posibilidad necesita de la presentación y trámite de un proyecto de ley que sea aprobado por el Congreso, y ese “proyecto” aún no ha sido presentado.
b) No tengo duda de que, si se presentase ese “proyecto” por parte de los autodenominados “libertarios”, habrá una intensa reacción de la gente de nuestra cultura, en general, y de nuestro cine, en particular, que transversalmente nos movilizará ante la opinión pública, en la calle, y ante diputados y senadores para oponernos al mismo.
c) Cabe recordar que ninguno de los diputados o senadores de los partidos políticos que integran la coalición “Cambiemos” presentó nunca un proyecto en ese sentido. Y es más, hay diputados de “Cambiemos” que -por el contrario se han sumado al Proyecto de Ley presentado por la Diputada Pedrali (y elaborado por el Espacio Audiovisual Nacional), mediante el cual se propone fortalecer al INCAA, ampliar sus competencias e incrementar sus recursos. También fue políticamente apoyado por el Bloque Federal (que hoy integran junto con la Democracia Cristiana y Socialistas en “Juntos por el País”).
d) Debemos tener presente que, en el caso de que el resultado electoral de octubre repita en los grandes números el resultado de las “Paso”, cabe pensar que en la composición de la Cámara Honorable Cámara de Diputados de la Nación de Diputados, en defensa del Instituto, tendremos, como mínimo, al Bloque de “Unión por la Patria” (95), los diputados de “Juntos por el Cambio” (3) que apoyaron el Proyecto Pedrali-EAN; los diputados de “Hacemos por Nuestro País” -o Bloque Federal- (6), los diputados del “Frente de Izquierda” (4) y los diputados “Provinciales” (3), lo cual da un total de 111 diputados. Entiendo que esta composición de la Cámara de Diputados NO permitiría la aprobación de una Ley que disuelva el INCAA. Pero, ADEMÁS, la proyección que se realiza respecto de la futura composición del Senado es: “Unión por la Patria”: 35; “Juntos por el Cambio”: 27; “La Libertad Avanza”: 8; “Hacemos por Nuestro País”: 1; Provinciales: 1.
Esta composición proyectada implica que ni aun sumándose todos los senadores de “JxC” y de “La Libertad Avanza” podrían imponer la aprobación de ese proyecto de Ley contra los senadores de “Unión por la Patria” más el senador de “Hacemos por Nuestro País”.
Por lo dicho, y de acuerdo a la futura composición del Congreso, considero que no es probable que se pueda disolver el INCAA, como lo pretenden Marra y Milei con discurso de barricada propio de las campañas electorales.
3. Inviabilidad constitucional de un “Decreto de Necesidad y Urgencia”. En la hipótesis de que un presidente quisiese “atropellar” o destruir al INCAA mediante un DNU, NO podrían afectarse los impuestos y su asignación al Fondo de Fomento (y su destino), por cuanto la Constitución Nacional impide expresamente que, mediante un DNU, se afecte el régimen de impuestos y su afectación.
4. Propiciar el “Proyecto EAN” es una buena defensa política y jurídica del INCAA. El Proyecto PEDRALI-EAN tiene el respaldo político de relevantes diputados nacionales de diferentes bloques y de entidades como Argentores, Apima, PCI, la Academia y DAC, así como de notorias personalidades del ámbito audiovisual.
El Proyecto PEDRALI-EAN, más allá de la perfectibilidad de todo proyecto humano y de todo proyecto de Ley en las Comisiones de las Cámaras, es el único proyecto de Ley con estado parlamentario que propone fortalecer el INCAA, ampliar sus competencias, incrementar sus recursos e implementar una política federal para el desarrollo del audiovisual nacional, que ha sido apoyado transversalmente en la Cámara de Diputados. Por esa razón, difundirlo y propiciarlo es un sólido camino para defender al INCAA de las irresponsables amenazas mencionadas.
Julio Raffo clarificó a GPS Audiovisual algunas de las interpretaciones erróneas sobre los fondos del INCAA.
-¿Qué parte de veracidad tiene la frase “El INCAA es parte de lo que denominamos el gasto político”, empleada durante la campaña electoral?
La afirmación de que el presupuesto del INCAA configura gasto político en la Argentina es totalmente falsa. No es un gasto sino una inversión que el país hace para tener, desarrollar y fomentar su audiovisual nacional. Es parte de una política de Estado que se genera aproximadamente a partir de 1930 y que viene continuado y permanente durante todos los gobiernos de todos los colores. Una política de Estado en beneficio de los argentinos, de su identidad cultural y su capacidad creativa en el campo audiovisual.
-¿Hasta dónde se puede evaluar seriamente la propuesta de una plataforma electoral de cierre del INCAA?
La propuesta con respecto al cierre del Instituto es falsa. Me extraña que se la haya propiciado y me extraña que se la tome en serio como posibilidad. Por dos razones: por un lado, el Instituto fue creado por una Ley de la Nación y para derogarlo se necesita otra ley. Las leyes de la Nación necesitan ser aprobadas por las dos Cámaras. De acuerdo al resultado electoral es imposible, o casi imposible creer que una ley que destruya el INCAA vaya a ser aprobada por los diputados para conseguir la mayoría.
Digo “casi” imposible porque en el horizonte político de la Argentina pasan siempre cosas muy raras. Por ejemplo: la ley que extinguió las asignaciones específicas que garantizaban al INCAA sus recursos, propuestas por (Mauricio) Macri, fue aprobada en Diputados y en el Senado casi por unanimidad de los bloques de Juntos por el Cambio y el Frente de Todos.
Por otro lado, alguien ha sostenido que se podría destruir el INCAA por un Decreto de Necesidad y Urgencia. Debo decir que el motor del funcionamiento es el Fondo de Fomento Cinematográfico, integrado por una recaudación impositiva afectada específicamente al INCAA y a su destino. Y por ser una asignación impositiva asignada para una necesidad específica no puede ser motivo de derogación o modificación por DNU porque la Constitución lo prohíbe. Igual que en temas impositivos, penales o electorales.
-Hay quienes sostienen que el INCAA se sostiene con los impuestos de la comunidad. ¿Cuáles son esos impuestos, de qué forma se financia?
Los recursos fundamentales que sostienen el INCAA y nutren el Fondo de Fomento Cinematográfico son el impuesto que paga el espectador de salas de cine y el gravamen que pagan las emisoras al ENACOM. Hay un ingreso casi inexistente que es por la comercialización de videocasetes. Y una pequeña parte que proviene de multas –sobre todo de cuotas de pantalla o de devolución de créditos- que el INCAA no aplica.
Julia Montesoro