Francisca D’Agostino, secretaria de Cultura de Entre Ríos, anunció el fin de su gestión como directora ejecutiva del Festival Internacional de Cine de Entre Ríos, tras su quinta edición.
La muestra, que se llevó a cabo del 6 al 9 de septiembre en Paraná y cinco ciudades de la provincia, es el encuentro anual más importante de la región, tanto en el área de proyecciones como en el mercado.
Organizado por la secretaría de Cultura de Entre Ríos, el Festival logró consolidarse como una herramienta esencial para la captación de nuevas audiencias y para el fomento y visibilización de la actividad audiovisual regional.
-Si tuvieras que elegir un aspecto destacable del 5º FICER, ¿cuál sería?
-Nos sorprendieron varias cosas, pero haría foco en dos: el crecimiento de espectadores en relación a la edición del año pasado y la elección en el voto del público. La mayoría de las películas seleccionadas tenían el sello de los 40 años de la Democracia, uno de los tópicos de la programación. En cada una de las secciones hubo películas con ese sello, que simboliza una celebración de gran importancia para los argentinos. Estamos felices porque eso también demuestra cuánto sirve, sirvió y va a servir el cine nacional en la construcción de la memoria colectiva.
-Al FICER asistieron 8500 espectadores, una cifra en crecimiento. ¿Qué explicación le das a ese desarrollo?
Obviamente la selección de las películas: la programación tiene mucho que ver. También la incorporación de subsedes: tuvimos cinco localidades del interior. Pero sobre todo porque el festival está consolidado. La gente ya lo conoce y lo espera. Tenemos la sensación de que los espectadores que asisten no son personas que consumen cine todo el tiempo. Se dejan sorprender por la programación del festival. Van a ver una película y después vuelven para ver otras porque les gustó lo que vieron o se quedan y ven la que sigue. Eso palpitábamos, por lo que veíamos y por el público que encontrábamos en los pasillos y la boletería. El FICER, más allá de ser un evento, funciona también como un lugar en donde el público ya se habituó a ir.
-Un aspecto importante de esta edición fue el protagonismo que tuvieron las actividades vinculadas a la infancia. ¿Por qué decidieron orientarse hacia allí?
Porque nos parece importante poder mostrarle a los chicos, desde edades muy tempranas, otra forma de ver cine. Los niños son altos consumidores de realizaciones audiovisuales, pero en plataformas como tablets, celulares y televisores. Queríamos mostrarles otra forma. Para nosotros la mejor forma de ver cine es colectivamente. En una sala preparada para eso y en una pantalla grande. Muchos de los chicos que fueron estuvieron participando de funciones para el público general, pero también para las escuelas durante la mañana. Tal vez era la primera vez que iban al cine, que estaba especialmente pensado para ellos. Entraban y quedaban asombrados de la pantalla. También tuvimos una serie de artistas mediadores, que lo que hacían era explicarles ¡Fue una experiencia hermosa! Estábamos felices de ver la sala llena de chicos atentos. No perdían la atención a ningún momento. Estaban todos callados y concentrados.
-Siempre es un desafío mantener la concentración de un niño…
-¡Claro! Pensaba que iba a ser un griterío. ¡Y quedaron totalmente cautivados! Me pasó llegar tarde a una proyección infantil, con 800 chicos adentro. Al abrir la puerta varios chicos me pidieron silencio porque entraba luz. ¡No lo podía creer! Estaban totalmente capturados por lo que estaba pasando. Entendieron rápidamente el código de que las salas se oscurece y lo que pasa en ese momento es lo que ocurre en la pantalla. Nada exterior lo puede molestar. Salí con mucha vergüenza y rápidamente cerré la puerta por interrumpir ese momento mágico.
-Otro aspecto que se destacó es la puesta en marcha del proyecto de cinemateca para la provincia de Entre Ríos. ¿Cuáles son los próximos pasos?
La cinemateca es un sueño de hace mucho tiempo. La Ley de Fomento Audiovisual incluye la creación de un archivo de imágenes de la provincia. Lo que logramos en esta edición es que las empresas Sidecreer y la Comisión Técnica Mixta de Salto Grande nos donaran equipos que nos van a servir para la cinemateca. Un archivo necesita mucho tratamiento específico audiovisual para poder recuperar esas cintas que están en diferentes formatos, como de 8 mm o 16 mm. Cada uno de esos formatos antiguos requiere algún tipo de equipamiento específico para poder ponerlos en valor. Ya logramos tener el equipamiento: ahora comenzaremos a recopilar.
-En tu discurso de clausura anunciaste que es el final de tu gestión al frente del FICER. ¿Cuáles son tus reflexiones sobre el trabajo que desarrollaste?
¡Fue mucho trabajo pero estoy feliz! Hay un festival consolidado y una ley sancionada. El gobernador (Gustavo Bordet) firmó la reglamentación de la Ley y la entregó el primer día del festival al sector audiovisual entrerriano. Hay un crecimiento del público. Se anunció la creación de la cinemateca… Son muchos sueños que se fueron cumpliendo. Y hay un gran potencial: lo importante terminar mi gestión con algunos aspectos consolidados, para que trasciendan las gestiones y los gobiernos.
-¿Tu actividad futura seguirá vinculada al desarrollo audiovisual entrerriano?
-¡Por supuesto! Más allá del lugar que ocupe, sea funcionaria o no, lo importante es seguir apoyando al sector audiovisual y a todos los sectores de las diferentes disciplinas. Inclusive desde el sector independiente, como lo hacía antes. Para mí es fundamental trabajar en cultura. Porque es lo que me gusta. Y porque es lo que acerca a la gente.
Julia Montesoro